I
Hari, Dios
Saran, Discípulo incondicional
A los pies de su Maestro
Dalam, El justo, el equilibrado

II
Estos, mis nombres Internos
Me los otorgó el Maestro
Sin decir significado y
Fue lo mejor que hizo
Pues no hubiese aceptado
El Honor INMERECIDO
De
Hari haberme llamado
Sabiendo, como soy, lo sé
Una copa orgullosa
Con muy poco de Amor
Siempre de pecados plena…

III
Que puedo decirte Hermano?
Por sorpresa me has tomado
Pues mira que he conocido
Conocido a Hombres "sabios"
Que solo me han preguntado
Cuantos discípulos ya he juntado
Como si las Almas fuesen
Una yunta de ganado
O un atajo de reses y
No Almas de soldados
Que, Batallando en el tiempo y
En los Campos Internos
Algunos ya sus medallas
Sus medallas han ganado
Sin aún ser capitanes
Sus batallas van librando
Una a una, de a poco
Pero también tropezando
Que un soldado, un infante
Ni sable ni lanza suelta
Aunque caiga una y otra vez
El fango en la cara lleva
Hasta que aparece Ajaib
Dos cuerdas trae completas
Una para dar SONIDO
En la Otra la LUZ lleva y
Agrupando a sus tropas
En el campo las reúne
Las refresca, las arenga
Dándoles escudo y fuerza
El filo de sus sables pule
Que un Iniciado de ÉL
Ya no teme ni se teme
Pues aquietando Ruido Interno
En el espejo de su mente
Observa como se refleja
Muy Refulgente SU imagen
O sea, la Imagen del Padre
Puesto que, al fin y al cabo
Solo para esto sirve
Para de ÉL hacer conciencia…
 

 

 

Playa Parguito, 15/07/2008

Isla de Margarita, República Bolivariana de Venezuela

 

 

   

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